Eloisa Martínez, descrita por sus amiguitos como juguetona y alegre, tenía 10 años de edad y quería ser bailarina. Ese sueño quedó atrás, porque la noche del miércoles fue amarrada, violada y estrangulada por alguien que luego abandonó su cuerpo en un matorral. Era la menor de ocho hermanos y este mes cumpliría 11 años.
Eloisa Martínez, descrita por sus amiguitos como juguetona y alegre, tenía 10 años de edad y quería ser bailarina. Ese sueño quedó atrás, porque la noche del miércoles fue amarrada, violada y estrangulada por alguien, que luego abandonó su cuerpo en un matorral. Era la menor de ocho hermanos.
La niña, quien el día 28 cumpliría 11 años, era hija de Candelaria Martínez, de 42 años, y Roberto Encarnación, de 32.
Residía en el barrio Jacagua, de Villa Mella, con su madre y su padrastro, quien no fue identificado y está detenido, junto a cuatro haitianos, para fines de investigación.
Fabián Sánchez, abuelo de Eloísa, narró que la niña desapareció la noche del miércoles, tras salir de su vivienda, ubicada en el mismo sector, donde la niña acostumbraba a visitarle.
Dijo que cuando sus padres notaron su ausencia, les explicó que la niña se había marchado, pero estos no emprendieron su búsqueda, pues creyeron que el abuelo estaba mintiendo y les estaba ocultando a la niña.
Desgarrador
Mientras sus padres dormían, ajenos al horror del que había sido víctima, Eloísa yacía a orillas de la cañada Jacagua, donde fue amordazada, maniatada con su misma ropa interior, violada y estrangulada, según relató Fabián, quien así describió la forma en que fue encontrada su nieta.
La malograda menor fue hallada el pasado jueves a las 7:00 de la noche por una tía, en un terreno baldío próximo a unas edificaciones en construcción.
Eloísa, quien había alcanzado el cuarto grado de educación básica en la escuela Jacagua, es recordada por sus amigos y familiares como una niña muy alegre, simpática y amante de los animales.
“Nosotros practicábamos baile, jugábamos mucho; ella era muy simpática con todo el mundo” comentó uno de sus hermanos, de 14 años de edad, mientras guiaba a reporteros de Hoy a la escena del crimen.
Uno de sus condiscípulos dijo que era una niña muy buena, a quien le gustaban mucho los animales.
“Ella era tan buena que hasta a los animales le caía en gracia” comentó el amiguito.
La Policía Nacional informó que ya ha ocupado evidencias que podrían llevar a la solución del caso.
El cuerpo de la menor fue velado ayer en casa de sus abuelos, en la comunidad de Jacagua, y fue sepultado en la tarde, en el cementerio Los Casabes.
Zoom
Detenidos
Cuatro haitianos y el padrastro de la menor, al que no fue identificado, fueron detenidos por la Policía para fines de investigación.
Consternados
Moradores del barrio Jacagua, de Villa Mella, dijeron estar consternados por el asesinato de la menor y exigieron a las autoridades que el crimen no quede impune. Familiares calificaron el hecho como un abuso y pidieron justicia.
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