Hazel
Jones sufría fuertes calambres y abundantes hemorragias durante su
menstruación en la pubertad. Sin embargo, no fue al médico hasta la edad
de 18 años, cuando su novio de entonces le dijo que tenía algo
“diferente” en sus genitales: dos orificios.
La
joven y guapa británica de 27 años convive con una rara condición:
tiene dos úteros, dos cérvix y dos vaginas. La razón de esta anomalía es
que Hazel padece una malformación congénita denominada útero didelfo,
pero en su versión más insólita, que afecta a una de cada millón de
mujeres.
“Desde
que lo sé, se lo cuento a todo el mundo. De hecho, si una mujer quiere
echarle un vistazo, se lo enseño sin problemas. No es algo que me
avergüence“, confesó la joven este miércoles en el magazine matinal
“This morning” de la cadena británica ITV.
Esta
chica pudiera considerarse afortunada, al haber vivido situaciones tan
extraordinarias como perder la virginidad “dos veces”, según reveló
durante la entrevista. Además, los médicos le advirtieron que tendrá que
tomar precauciones cuando quiera concebir porque tiene un mayor riesgo
de sufrir un aborto espontáneo, parto prematuro o hemorragias durante la
gestación. En caso de quedar embarazada, deberá evitar quedarse en
estado al mismo tiempo en el otro útero.
A
pesar de estas contraindicaciones, Hazel no ha querido operarse para
corregir esta malformación porque el postoperatorio es “muy desagradable
y deja una gran cicatriz”. Tampoco parece tener problemas en “otros”
aspectos: “Mi vida sexual es estupenda”, aseguró.
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